¿Por qué el sufrimiento?
Gran parte del sufrimiento
es por nosotros elegido.
Si al menos tuviéramos la fuerza de esquivarlo,
sabríamos, a qué hora, y en qué lugar
nace el sufrimiento,
pues, te prometo que vamos a desafiar el
sufrimiento.
Ponte frente a él, desafíale el camino
que desea recorrer ...
No, no lo dejemos avanzar
no está permitido en tu mente
ni en la mía que siga su juego.
¡Stop!
No puede él lograr su objetivo.
Nosotros somos más poderosos,
tienes la fortaleza,
la ternura del que ama sin egoísmo;
tienes el coraje y audacia del marinero,
la sabiduría que te remueve por dentro
te sacude y te hace vivir,
esa que te pide ¡¡¡yo quiero ser libre!!!,
libre, sí, bien libre, en el pensamiento,
y todo tu ser.