El fomento de la lectura
El fomento de la lectura ¿Una batalla perdida?
Aquellos que de vez en cuando leen mi blog saben que realmente no me gusta hacer comentarios sobre temas ajenos a mis cuentos, normalmente me gusta que mis cuentos hablen por sí solos y que este espacio esté inundado por la imaginación. Pero en esta ocasión de verdad siento la necesidad de hablar de un tema en particular que me molesta mucho, y es la apatía de los padres de familia hacia el fomento de la lectura en los niños... ¡en sus propios hijos!
Hace poco les hablé de un proyecto iniciado por el jardín de niños paraíso infantil, en que los profesores tomaron uno de mis cuentos para que los pequeños lo comentaran y lo ilustraran con sus fotos recreando escenas de la historia en un intento de interesarlos en la lectura.http://www.slideshare.net/bucha/cuento-una-promesa-es-una-promesa La reacción de los niños fue HERMOSA, tristemente la de los padres fue de total y completa apatía, una apatía que no sólo se hace presente en ese colegio sino en todas las escuelas de nuestro país.
Es increíble que los esfuerzos de algunos profesores y voluntarios se vean abrumados por el desinterés de los padres de familia, y desafortunadamente ante tal escenario los proyectos de fomento a la lectura fallan miserablemente. La pregunta que deseo hacerle a esos padres de familia que no les importa leerle a sus hijos es ¿QUE CASO TIENE ENTONCES QUE MANDEN A SUS HIJOS A LA ESCUELA? Un niño que no sabe leer bien y que no tiene el interés de leer (gracias al ejemplo adquirido en casa) realmente no tiene futuro, la prueba de ello se encuentra en las calles a lo largo y ancho de nuestro país en jóvenes que abandonaron la escuela no sólo por la falta de recursos, sino porque no entienden absolutamente ninguno de sus libros de texto, porque no saben investigar, porque por increíble que parezca hay jóvenes que nunca han pisado una biblioteca, y peor aún hay miles de jóvenes que fallan en sus exámenes de admisión a la educación media superior y superior PORQUE NO ENTIENDIERON LAS INSTRUCCIONES DE LOS EXÁMENES.
Se que al ver a la líder del sindicato de maestros promocionar la lectura en esos spots televisivos no le quedan a uno ganas de agarrar un libro porque la tipa no puede leer la frase “INFLUENZA H1N1” ni aunque le valga la vida en ello. Y que tampoco quedan ganas de siquiera hojear un libro cuando el secretario de educación pública afirma que ver telenovelas es la mejor fuente de educación que tiene nuestro país.
Pero es precisamente por estos hechos que lejos de ser “graciosos” son alarmantes por el que los padres de familia y educadores deben a toda costa fomentar el hábito de la lectura en los pequeños. Cuando he cuestionado a los padres de familia el porqué de su negativa a fomentar el hábito de la lectura hay tres respuestas en común:
1- los libros son muy caros, el presupuesto no alcanza para desperdiciar dinero en ésas cosas.
2- No tengo tiempo, trabajo todo el día.
3- Leer cuentos no les sirve de nada a los niños, es pura pérdida de tiempo.
A estas personas les digo que es cierto que muchos libros son muy costosos y sé muy bien que las necesidades básicas de una familia ocupan todo su presupuesto, pero les digo que NO TIENEN QUE GASTAR UN CENTAVO, para eso están las bibliotecas, con todo y su personal calificado para orientarlos a escoger libros adecuados a las necesidades educativas de sus hijos; quizá me digan que las bibliotecas les quedan muy lejos, que cuando salen de trabajar ya están cerradas, entonces les digo que en internet pueden encontrar no cientos sino miles de cuentos infantiles de todo tipo total y completamente gratis, hay increíbles proyectos como https://www.encuentos.com/ o http://www.cibercuentos.org/ y miles de blogs como el mío que ofrecen trabajos literarios de gran calidad sin que les cueste un centavo.
Me es imposible creer que los papás digan que no tienen tiempo, porque parece que siempre encuentran tiempo para ver telenovelas y esos programas estúpidos y sin sentido que plagan la televisión, aquellos como se vale, sabadazo, Laura, pequeños gigantes ... etc., etc., etc., programas que no solo deberían ser la vergüenza de los “creativos” de las empresas televisivas, sino que son una vergüenza para la especie humana, son denigrantes, vacíos, sin sentido, me atrevo a afirmar que son nocivos para la salud, y obviamente no son adecuados para los niños.
De verdad creo que nuestro país sería completamente diferente si en lugar de ver esos programas y los noticieros plagados de notas rojas y amarillistas los padres de familia tomaran un libro, o bajaran un cuento de internet y lo leyeran con sus hijos, no tener tiempo no es una excusa, siempre hay tiempo, diez minutos, quince, media hora quizá no diariamente, pero a la semana, me parece algo muy posible. HAY TIEMPO no lo nieguen.
Para aquellos que afirman que leer cuentos a un niño es algo inútil les pregunto esto: ¿acaso es inútil estrechar los lazos afectivos con sus hijos al leerles antes de dormir? ¿Acaso es inútil incrementar su vocabulario para que la palabra güey no sea la única que conozcan? ¿Acaso es inútil avivar su imaginación para incentivarlos a querer aprender por sí solos? ¿Acaso es inútil que a través de fomentar el gusto por la lectura sus hijos sean autodidactas y se destaquen en sus futuras carreras? ¿Acaso es inútil que sus hijos sean cultos y educados?
¿Acaso es inútil proveerles las herramientas para que puedan forjarse un buen futuro? Porque deben saber que la única respuesta a todos los problemas que enfrenta nuestro país es la educación, y toda educación parte de la misma base SABER LEER Y ESCRIBIR y si esta base no es firme, o es inexistente entonces todo se viene abajo.
A todos aquellos padres de familia que han ignorado esta parte vital de la educación de sus hijos les pido que recapaciten, les digo que no es demasiado tarde para que también ustedes de la mano de sus pequeños adquieran el hábito de leer, y que con ello mejoren la calidad de vida de su familia. NO HAY EXCUSAS, LA EXCUSA SON USTEDES MISMOS.
Por último, quiero terminar esta larga entrada de mi blog hablando del otro lado de la moneda, de los muchos padres de familia, profesores, educadores, hermanos, tíos, primos, abuelos, escritores, editores, fundaciones, grupos de voluntarios a quienes sí les importan sus hijos, personas que sí quieren ver y formar parte de un cambio, personas que ven la forma de hacer tiempo para leerles a los niños o para escribir cuentos especialmente pensados para ellos, y a todos y cada uno de ellos en donde quiera que se encuentren les doy las gracias, y les digo que no se rindan, que es una batalla diaria, pero que por cada persona que no le interesa el futuro de sus hijos, gracias a gente como ustedes hay un niño que adquiere el gusto por la lectura, gracias a ustedes y sus proyectos hay niños que tendrán un mejor futuro.
NO SE RINDAN
Fin
Reflexión sobre la lectura en los niños.