Saltar al contenido

Te he invitado al festival del mundo
y tu vida está bendita.
Camina y sonríe topándose contigo.
Respira ese aire tibio y estridente
apreciando sus diferencias
que de ellos, vivirás por siempre.
El suelo que pisas, el que sostiene
tu gigante figura
te acoge como un tesoro.
Respóndele con prudencia,
silencia sus temblores.
Mira a lontananza
que majestuosidad te rodea.
Por eso te he invitado
al festival del mundo.
Curiosidades tiene por todos lados
pero eres tú, quien debe sonreír
y caminar, topándote a ti mismo.
Fin
Poesías para jóvenes y adultos.

Califica esta entrada

Por favor, ¡Comparte!



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *