Un niño estaba apenado
y desolado lloraba,
agachaba la cabeza
y la cara se tapaba.

Pasó por allí una niña,
y al ver que estaba tan triste,
sin palabras de consuelo
solo acertó a sonreírle.

Tocó con la mano su hombro,
y se quedó allí callada,
y aunque el niño no le habló,
su llanto a la vez cesaba.

Fin

Poema infantil sugerido para niños de siete a nueve años

cuentosentretenidos-marissa.blogspot.com.es

1/5 - (1 voto)

Por favor, ¡Comparte!



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *