¿Dónde está el sol escondido?
¿Por qué no quiere salir?
Porque en la cama dormido
está soñando feliz.
Pues dile que soy la luna
que me voy a descansar,
que ya debe amanecer
y no hacer el holgazán.
Que los pájaros lo esperan
para empezar a cantar,
y mariposas y alondras
lo aguardan para volar.
Los conejos y las liebres,
el mosquito y su zumbido,
los pétalos de las flores,
echan en falta el rocío.
Que lo espero unos minutos,
después que no cuente conmigo.
El sol llega de repente.
¡Mira que eres impaciente!
Ha contestado a la luna.
Me estoy lavando los dientes,
y salgo inmediatamente.
Deja las puertas cerradas,
las llaves en su lugar,
las luces bien apagadas,
y vete ya a descansar
que amanezco en un pis pas.
Fin
Poema infantil sugerido para niños de cinco a seis años
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