¡Don invierno llegó!
Montado en nubes enormes
silbando con el viento, espléndido
y abrigado desde la cabeza a los pies.
¡Brrr, brrr …! , alguien se quejó,
el miedo se extendió,
sin embargo un árbol seco se alegró
y la noche su nueva rutina aceptó.
Y la tierra contenta está,
pues su vientre se hinchará,
a las semillas Don Invierno arrullará
y con los niños la lluvia jugará.
Don invierno trajo lindos farolitos
que él mismo preparó,
para que las familias se acurruquen
y con amor el mundo inunden.
Fin