Yo no quiero que me den
el juguete más precioso
Sólo quiero que me besen.
Yo no quiero que me aplaudan
cuando traigo buenas notas
sólo quiero que me escuchen
y discutamos de veras.
Yo no quiero que me lean
un cuento apenas comprado
con toda la indiferencia
quiero un cuento, un cuento grande
de la boca de mis padres
con una sonrisa abierta.
Sólo pido la alegría de sentirnos,
escucharnos y que ustedes
me comprendan, pues yo sólo
soy un niño que pide amor,
comunicarse quisiera,
que juntos compartamos
la alegría, el cariño y la tristeza.
Aunque sólo soy un niño
y que los quiero de veras,
a veces me siento solo . . .
Es por eso que les pido
que me escuchen cuando puedan
y que den a mis preguntas
las más sinceras respuestas.
Porque yo los quiero mucho
y quiero que me comprendan . . .
Fin
Autora: Zunilda Borsani