Por Sandra Lampertte. Poema para los abuelos.
Conozco a un señor
Conozco a un señor
siempre dispuesto y atento
con ganas de escuchar
los secretos de mi andar.
No ha sido fácil vivir
me lo dijo sus latidos
pero que esperanza de fé
cuando me vió por primera vez.
Su mirada era diferente
parecía un niño sonriente
sus manos me acariciaban
como si fuera de porcelana.
Su calor envolvente
me protegía com un valiente
me paseaba y me hablaba
como todas las mañanas.
Y por la noche decía
todos lo santos días
es este tu abuelo
¡que te ama hasta al cielo!