Leyendas mitológicas chinas.
La "Leyenda del Dragón y el Ave Fénix" narra la historia de estas dos poderosas criaturas de la mitología china. En un tiempo en el que los ríos desbordaban y la diosa madre buscaba el equilibrio, los dragones se alzaron como guardianes de los elementos acuáticos y celestiales. Con sus garras y fauces, controlaron las aguas y moldearon el paisaje. Los dragones, representando el Yang, encontraron su contraparte en el Feng, el ave Fénix, personificación del Yin. Juntos, en un equilibrio perfecto, irradiaron la luz del Tao, la fuerza suprema del universo.
La leyenda ilustra la búsqueda del equilibrio entre las fuerzas opuestas y complementarias del Yin y el Yang. Representa la importancia de la armonía y el reconocimiento del Tao en la vida, enseñando que la sabiduría reside en aquellos que reconocen su ignorancia y siguen el flujo natural del universo.
El Dragón y el ave Fénix
Cuando todavía las aguas no estaban controladas y los ríos en su desborde arrasaban los campos, la diosa madre procreó benéficos descendientes que terminaron ordenando ese caos diluvial.
Trabajando en el control de los ríos, de los lagos, del mar y de las nubes, los brillantes dragones navegaron por las aguas y el cielo. Con zarpas de tigre y garras de águila, rasgaban con estruendo las cortinas de lo alto que chispeando ante el descomunal embate dejaban en libertad a las lluvias.
Ellos dieron cauce a los ríos, contención a los lagos y profundidad a los mares. Hicieron cavernas de las que brotaba el agua y por conductos subterráneos las llevaron muy lejos para que surgieran de pronto, sin que el asalto abrasador del sol las detuviera.
Trazaron las líneas que se ven en las montañas para que la energía de la tierra fluyera, equilibrando la salud de ese cuerpo gigantesco. Y muy frecuentemente tuvieron que luchar con las obstrucciones que provocaban los dioses y los hombres ocupados en sus irresponsables afanes.
De sus fauces brotaba como un humo la niebla, vivificante y húmeda, creadora de mundos irreales. Con sus escamosos cuerpos serpentinos cortaban las tempestades y dividían los tifones. Con sus poderosos cuernos; con sus afilados dientes, ningún obstáculo era suficiente, ningún enredo podía permanecer.
Y gustaban de aparecerse a los mortales. A veces en los sueños, a veces en las grutas, a veces en el borde de los lagos, porque en éstos solían tener sus escondidas moradas de cristal en las que bellos jardines se ornaban con frutos destellantes y con las piedras más preciosas.
El Long inmortal, el dragón celeste, siempre puso su actividad (su Yang) al servicio del Tao y el Tao lo reconoció permitiéndole estar en todas las cosas, desde lo más grande a lo más pequeño, desde el gran universo hasta la partícula insignificante. Todo ha vivido gracias al Long. Nada ha permanecido inmutable salvo el Tao innombrable, porque aún el Tao nombrable muda y se transforma gracias a la actividad del Long. Y ni aún los que creen en el Cielo y el Infierno pueden asegurar su permanencia.
Pero el Long ama al Feng, al ave Fénix que concentra el germen de las cosas, que contrae aquello que el Long estira. Y cuando el Long y el Feng se equilibran, el Tao resplandece como una perla bañada en la luz más pura.
No lucha el Long con el Feng porque se aman, se buscan haciendo resplandecer la perla. Por ello, el sabio arregla su vida conforme al equilibrio entre el Dragón y el Fénix que son las imágenes de los sagrados principios del Yang y el Yin.
El sabio se emplaza en el lugar vacío buscando el equilibrio. El sabio comprende que la no-acción genera la acción y que la acción genera la no-acción. Que el corazón de los vivientes y las aguas del mar, que el día y la noche, que el invierno y el verano, se suceden en el ritmo que para ellos marca el Tao.
Al fin de esta edad, cuando el universo haya llegado a su gran estiramiento, volverá a contraerse como piedra que cae. Todo, hasta el tiempo, se invertirá volviendo al principio. El Dragón y el Fénix se reencontrarán. El Yang y el Yin se compenetrarán, y será tan grande su atracción que absorberán todo en el germen vacío del Tao. El cielo es alto, la tierra es baja; con esto están determinados lo creativo y lo receptivo... con esto se revelan los cambios y las transformaciones.
Pero nadie puede saber realmente cómo han sido ni cómo serán las cosas, y si alguien lo supiera no podría explicarlo.
El que sabe que no sabe es el más grande; el que pretende que sabe pero no sabe, tiene la mente enferma. El que reconoce la mente enferma como que está enferma, no tiene la mente enferma. El sabio no tiene la mente enferma porque reconoce a la mente enferma como la mente enferma.
Fin.
El dragón y el ave fénix es una leyenda con origen en la mitología china.
Y para entender mejor la "Leyenda del Dragón y el ave Fénix", la explicación de algunos de los términos que se utilizan en la breve historia como: ¿Qué es Long? ¿Qué es el ave Fénix? ¿A qué llaman Tao? ¿Qué representa el Yin y el Yang? Veamos.
¿Qué es el Long para la mitlogía china?
En la mitología china, "Long" se refiere a los dragones, criaturas legendarias que ocupan un lugar central en la cultura y la mitología china. Los dragones chinos son diferentes de los dragones occidentales, ya que se los considera seres benevolentes y poderosos asociados con la sabiduría, la protección y la buena fortuna. Suelen ser representados como serpientes aladas, con escamas brillantes y un cuerpo largo. Se dice que tienen garras de águila, cuernos de ciervo y bigotes de carpa. Los dragones chinos son considerados guardianes y protectores, y se cree que controlan las aguas, las lluvias y los ríos. También se les asocia con la fertilidad y la renovación.
En la mitología china, los dragones son seres divinos que tienen la capacidad de cambiar de forma y volar. Son símbolos de poder y emperadores deidades chinas a menudo se representan montados en un dragón.
Los dragones chinos también tienen una fuerte presencia en las festividades tradicionales chinas, como el Año Nuevo Chino, donde los desfiles de dragones se llevan a cabo para ahuyentar a los espíritus malignos y traer buena suerte y prosperidad.
¿Qué es el Fénix para la mitología china?
En la mitología china, el "Fénix", conocido como "Fenghuang", es un ave sagrada y mítica que ocupa un lugar destacado en la cultura y la simbología china. Aunque el Fénix es más comúnmente asociado con la mitología griega, también existe una versión china de esta criatura legendaria.
En la mitología china, el ave Fénix es considerado el rey de las aves y representa la virtud, la belleza, la armonía y la renovación. A diferencia de su contraparte griega, el Fénix chino es una combinación de diferentes animales, que incluyen el cuerpo de una gallina, las alas de una golondrina, las plumas de un faisán, la cola de un pavo real y la cabeza de un pájaro carpintero. Es representado como un ave de plumaje colorido y brillante, con tonos de rojo, amarillo, azul y verde. Se dice que sus plumas son un símbolo de belleza y su canto es melodioso y armonioso.
Su presencia se considera un presagio de buena fortuna y felicidad y un símbolo de paz y prosperidad. También se asocia con el emperador y la emperatriz, simbolizando su poder y nobleza. A menudo se utiliza en ceremonias y eventos importantes, como bodas y coronaciones, como una representación de la felicidad y la fortuna venidera.
¿Qué es el Tao o Dao en la tradición china?
El Tao es una filosofía y concepto fundamental en la tradición china. El Tao (también escrito como Dao) se deriva del taoísmo, una corriente filosófica y religiosa que influye en gran medida en la cultura china, y se puede entender como el principio universal que subyace en todas las cosas y en el funcionamiento del mundo. Es un concepto complejo y abstracto que se traduce comúnmente como "el Camino" o "la Vía". El Tao es la fuerza cósmica que fluye en armonía y equilibrio, y que engloba todas las dualidades y polaridades existentes en el universo.
Según la filosofía taoísta, el Tao es incomprensible y no puede ser definido o explicado de manera racional. Es el origen de todo y se encuentra más allá de las limitaciones del pensamiento humano. El Tao se concibe como un estado de unidad y simplicidad en el que se reconcilian las dualidades y se encuentra la armonía.
En la mitología china, se cree que los dioses y seres divinos siguen el Tao en su naturaleza y acciones. También se dice que aquellos que siguen el Tao en su vida cotidiana pueden lograr la paz interior, la sabiduría y la conexión con el universo.
El Taoísmo, como tradición filosófica y religiosa, explora la búsqueda de vivir en armonía con el Tao. Promueve la espontaneidad, la simplicidad, el flujo natural de la vida y la no resistencia. A través de prácticas como la meditación y la cultivación de la virtud, los seguidores del taoísmo buscan alcanzar la unidad con el Tao y vivir en consonancia con sus principios.
¿Qué es el Yin y el Yang en la tradición china?
En la tradición china, el Yin y el Yang son conceptos fundamentales que representan las dos fuerzas opuestas y complementarias presentes en el universo. Estos conceptos son parte integral de la filosofía taoísta y tienen una influencia significativa en varias áreas de la cultura china, como la medicina, la cosmología y la moral.
El Yang representa lo luminoso, activo, masculino y expansivo. Se asocia con el sol, la luz, el calor y la energía. Es representado por el color blanco.
El Yin representa lo oscuro, pasivo, femenino y receptivo. Se asocia con la luna, la oscuridad, el frío y la calma. Es representado por el color negro.
El símbolo del Tao en el taoísmo se conoce como el Yin y el Yang, o Taijitu. Es un símbolo visual que representa la dualidad y la interdependencia de las fuerzas opuestas y complementarias en el universo. El Yin y el Yang son dos aspectos interconectados y en constante cambio que forman un todo equilibrado.
☯ ¿Qué representa el símbolo del Yin y el Yang?
El símbolo del Yin y el Yang (☯) consiste en un círculo dividido en dos mitades: una mitad es de color blanco y se llama Yang, y la otra mitad es de color negro y se llama Yin.
La curva que separa el Yin y el Yang indica que estas dos fuerzas están en constante movimiento y cambio. Además, dentro de la mitad blanca hay un punto negro y dentro de la mitad negra hay un punto blanco, lo que indica que cada aspecto contiene una parte de su opuesto, una semilla del otro, y que existe una interrelación mutua.
El símbolo del Yin y el Yang representa la idea de que todas las cosas contienen una dualidad intrínseca y que estas fuerzas opuestas se complementan entre sí para mantener un equilibrio. Es un recordatorio de que la armonía se encuentra en la interacción y el equilibrio de las fuerzas contrarias.
El Yin y el Yang también implican que cada uno da origen al otro en un ciclo eterno. Cuando una energía alcanza su máximo, comienza a transformarse en su opuesto. Por lo tanto, el equilibrio entre el Yin y el Yang es esencial para el funcionamiento equilibrado del universo.
¿Por qué el dragón es central para la tradición china? 🐲
Magnífico, maravilloso, legendario, ondulando con tanta gracia a través del vasto cielo como las profundidades del agua. Abajo. El dragón chino es uno de los monstruos más reconocidos a nivel mundial. Su comportamiento podría describirse como benévolo, pero su apariencia aún puede inspirar miedo. Y todos estos dragones, o como se los llame en la mitología china, han sido un componente crucial de la religión, la cultura, la mitología y el folclore en China durante miles de años.
El dragón es uno de los cuatro animales benévolos de la mitología china y uno de los 12 miembros del zodíaco chino, y esos son solo una pequeña parte de su influencia. Los dragones jugaron un papel importante en la historia de China. Ambos eran creadores y destructores y controlaban los elementos. Entonces, ¿qué tenía el dragón chino que lo convirtió en una figura tan central en la cultura china?
El dragón nació en China hace mucho tiempo y ha aparecido a lo largo de la historia antigua y moderna. Un dragón de jade descubierto en la cultura Hong sh data de hace unos 6000 años, y las cabezas de dragón aparecen en los huesos de Oracle desde el año 1300 a. C. E.
Más recientemente, Disney Shong Chii nos dio una representación hermosa y mitológicamente precisa de la criatura. Ese es un historial bastante sólido. Wong Fu, un historiador y filósofo chino de la dinastía hon del Este, escribió que la apariencia única del dragón es en realidad una combinación de muchas características animales diferentes, y la lista es larga.
Sus cabezas tienen la misma forma que un camello. Sus orejas son como un toro, y nos miran con ojos similares a un cabello o un demonio asesino dependiendo de la fuente. Sobre sus majestuosas cabezas crecen las astas de un ciervo. Tienen el cuerpo que se retuerce de una serpiente y el vientre bien acorazado de una almeja. Tienen las patas de un tigre y las enormes TA de un águila cubriendo finalmente todo su cuerpo las escamas protectoras de una carpa.
Algunos estudiosos creen que estos diversos atributos evolucionaron a partir de la influencia de las tribus dispares que eventualmente se unificaron en la China que conocemos hoy. Otros los ven como emblemáticos de características humanas deseables o como una amalgama representativa de antiguos tótems espirituales. Algunas tradiciones afirman que los dragones chinos ocultan una gran perla en la garganta o la barbilla. La perla a menudo representada en el arte como un disco blanco brillante en la garra o la boca de un dragón puede representar el sol, la luna o la tierra, o tal vez sea solo una joya gigante.
Independientemente, la capacidad del dragón para sostener el precioso orbe representa un poder inmenso. Incluso el número de escamas en el cuerpo del dragón chino tiene un significado importante. El número está fijado en 117, que en la filosofía y la religión tradicionales chinas representa un equilibrio perfecto entre la esencia negativa del yin y la esencia positiva del yang. Debido a esta dualidad natural, aunque por lo general es compasivo, el dragón también puede ser malicioso, o incluso estar realmente interesado en la política.
En el siglo XVII, los eruditos dijeron que el texto de J, las cinco ofrendas variadas, cuenta la historia de su propio encuentro con los dragones. Según Seth, mientras viajaba por mar a los 10 años con su tío en una misión diplomática, repentinamente fueron azotados por viento, lluvia, granizo, truenos y relámpagos. Tres dragones los rodearon. Al principio, todos estaban aterrorizados por las extraordinarias criaturas, pero un anciano comentó que debían estar allí para escuchar el mensaje del emperador.
Interactúan con dioses e inmortales en los cielos. Incluso sin alas, pueden volar por el aire. Son forma. Los cambiaformas capaces de adoptar cualquier tamaño o forma, incluida la forma humana, pueden volverse invisibles a voluntad, son muy inteligentes y, en algunas historias, incluso pueden hablar. Los profundos significados atribuidos a los dragones chinos son antiguos, tanto que sus orígenes exactos se pierden en gran medida en el pasado.
Sin embargo, la evidencia que tenemos sugiere que los dragones eran una faceta universal en todas las culturas tempranas de China, aunque las tradiciones y el significado espiritual diferían en las guías a través de montañas y mares, un tomo enciclopédico y una bestia china escrita entre el siglo IV y I. , BCE E, el dragón apareció como un dios de la naturaleza conocido como el Dios del trueno que usa su propio vientre para producir ecos.
Incluso existían los llamados cultos de dragones, grupos religiosos que adoran a los dragones y les daban ofrendas para apaciguarlos como seres acuáticos semidivinos. Los dragones controlan las tormentas, el granizo, el viento, los tornados, las inundaciones y todos los cuerpos de agua. Los dragones ayudaron a explicar el ciclo de la lluvia durante las dinastías de las canciones y, por lo tanto, también se decía que traían truenos y relámpagos. Este fue un desarrollo importante porque si los humanos podían invocar dragones, entonces también tenían una apariencia de control sobre la lluvia.
Durante este mismo período, las pinturas de dragones aumentaron dramáticamente en la antigua cosmología china. Hay cuatro tipos de dragones, el dragón celestial, el dragón del tesoro escondido, el dragón subterráneo o del inframundo y el dragón espiritual que controlan la lluvia y los vientos.
Pero en otras tradiciones, la taxonomía se expande a nueve, un número auspicioso en la numerología china, y curiosamente, del mismo número de animales, el dragón toma prestadas sus características al unirse al sistema de clasificación: el dragón alado, el dragón cuerno, el dragón enroscado, el dragón amarillo y el rey dragón.
El concepto de rey dragón solo se introdujo después de la llegada del budismo a China. Cuando el budismo llegó a la zona, los dragones fueron adoptados como símbolo de la iluminación, así como de la realeza. El budismo fue entonces importado de China a Japón alrededor del siglo VII, y los dragones llegaron con él.
Los dragones también se incorporaron más tarde al sintoísmo. Se creía que el dios sintoísta Sasan había matado a un dragón de ocho cabezas, lo que ciertamente me parece una historia de asesinos de monstruos.
En la mitología china, cuando uno de los cuatro polos que sostenían el cielo colapsó, una de las consecuencias desastrosas fue una gran inundación provocada por el dragón negro, una criatura malévola que solo podía ser detenida por la diosa madre Nua, pero otros dragones son no tan monstruoso.
Después de todo, uno de esos pilares de construcción del mundo fue construido por el dragón verde, una de las deidades de la creación, y otra historia más de creación de los pueblos bi. Cuando se creó el mundo, un gran dragón dorado yacía dormido bajo el mar. Cuando uno de los dos hijos de la madriguera cayó al océano, el mar comenzó a hervir, se despertó y, enfurecido por esto, el dragón dorado se tragó al sol. Comenzó a quemarlo, eventualmente brotó de su pecho y se convirtió en nubes, árboles, flores, pasto y animales de todo tipo.
Entonces, para resumir, no todos los dragones chinos son iguales. Sirven para diferentes propósitos. Algunos son celestiales, otros pertenecen al río. Algunos protegen, atesoran, actúan como deidades o sirven como conexión con lo espiritual.
Ah, y pueden tener descendencia humana o, más específicamente, emperadores. Esta es una de las razones por las que los dragones chinos están íntimamente ligados a la historia imperial. Durante el período de la dinastía Han a la dinastía Chin, el gran y poderoso dragón se asoció con los emperadores como una forma de mostrar que los gobernantes habían sido elegidos divinamente.
El primer emperador Han, conocido como el emperador amarillo, iba a ser descendiente de una madre humana y un dragón divino. Esta supuesta herencia se filtraba a todos los elementos de la autoridad del emperador, desde sus túnicas hasta sus camas. Los dragones amarillos o dorados eran particularmente venerados por los poderes imperiales, y el dragón de cinco telas se convirtió en un símbolo imperial oficial en el siglo XIV. Sus garras representan el poder del emperador sobre los cinco elementos, madera, fuego, tierra, metal y agua.
Eventualmente, a todos los demás se les prohibió usar cualquier ropa que representara un dragón de cinco Claude.
Eso no quiere decir que todas las historias de dragones se basaran en la mitología, el animismo o la leyenda. Los animales antiguos probablemente también jugaron un papel. Sí, estamos hablando de dragones y fósiles.
Ya en la dinastía china de la ginebra, que duró del 265 al 317 d. C., encontramos un texto que menciona el descubrimiento de lo que se creía que eran huesos de dragón en lo que ahora es la provincia de Siwan. Gran parte del sedimento en esta área se remonta a mediados del período Jurásico tardío, y el área está llena de fósiles. Allí se encontraron restos de dinosaurios como los terópodos depredadores, así como una enorme vaina del dolor con un cuello extremadamente largo que podía crecer hasta 25 metros de largo.
Los dragones habitan espacios exóticos, profundidades acuáticas misteriosas, cielos expansivos y reinos celestiales. Sus poderes son aterradores pero inspiradores y son hermosos en su fuerza. En otra mundanalidad, suerte, poder, sabiduría, valentía, fuerza.
Los dragones chinos inspiraron todo, desde prácticas religiosas hasta el emblema nacional. Innumerables obras de arte asombrosas y maravillas arquitectónicas para la danza del dragón mundialmente famosa. La criatura es inseparable de la historia del pueblo chino. Abrazar al dragón chino es celebrar la cultura china.
¿Qué te pareció "La leyenda del Dragón y el ave Fénix"? Por favor, deja algunos comentarios (✍🏼), califica esta breve historia mitológica con estrellas para que otros la encuentren en el sitio (⭐) y compártela con algunos amigos y conocidos, a través de las redes sociales o baja la leyenda en formato PDF y comparte por correo electrónico, Whatsapp o Telegram (🙏🏼). ¡Gracias!