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Gaturro y el mundo virtual de Cristian Dzwonik

Cristian Dzwonik (NIK), Creador de Gaturro.

Gaturro y el mundo virtual de Cristian Dzwonik

Nik, ‘menos conocido’ como Cristian Dzwonik, es uno de los dibujantes jóvenes más talentosos de la Argentina. Desde 1992, el chiste político del cuerpo del diario La Nación, la foto que habla o la página dominical de La Revista son considerados verdaderos editoriales de la realidad argentina.

Pero su personaje es definitivamente Gaturro, el simpático gato que desde 1996 aparece en la tira diaria de la última página del diario La Nación, para ser el comentarista y crítico político más sagaz y simple de la actualidad. Desde hace ya unos años la tira de Gaturro trascendió las fronteras de la Argentina y es publicada por varios periódicos de Latinoamérica. Cuenta además con una nutrida legión de seguidores en México, Miami y España.

En el 2002 recibió el premio Kónex de Platino que distingue al mejor humorista gráfico argentino de los últimos diez años. Nacido en Buenos Aires, Nik es egresado del Colegio Nacional de Buenos Aires y se recibió como Diseñador Gráfico en la Universidad de Buenos Aires. Completó, además, estudios de publicidad, computación gráfica y fotomontaje digital.

Aunque dibuja desde la más temprana edad, fue a los doce años que comenzó a vincularse verdaderamente con el humor en la escuela de Carlos Garaycochea, publicando sus primeros dibujos a los diecisiete años en la revista Muy Interesante de García Ferré.

Pasó por la editorial Kapelusz, por el diario El Cronista, por la revista de Cablevisión y por otros medios. A los veintidós ingresó en el diario La Nación y desde entonces se desempeña como humorista gráfico de actualidad en varias secciones. Desde 1994 colabora además con el semanario Noticias. En 2001 Gaturro llegó al teatro Coliseo en la obra El despertar de la música.

¿Quién es Gaturro?

Dice  www.gaturro.com:

«Es el gran protagonista de la tira. Vive con una familia que lo adoptó de muy chiquito. Le encanta su casa, pero al mismo tiempo le gusta andar por los techos del vecindario. Es un romántico incurable, está perdidamente enamorado de Ágatha e inventa mil y una técnicas para conquistarla, aunque siempre fracasa.

En los techos tiene su propio mundo, junto a los otros personajes de las casas vecinas. Además le fascina pasear por el barrio y hacer agudas observaciones de la vida cotidiana. Un día, sus dueños decidieron mandarlo al colegio, pero no porque les preocupara la educación de su minino… ¡¡Era para tenerlo menos tiempo en la casa!!

A partir de ahí, Gaturro participa de las clases de Ruda Vinagretti (Miss Vinagreting, cuando enseña Brutish English) haciéndola perder el control cada dos por tres. También (muy cada tanto) va a la oficina, donde hace de cadete (eso cree él, en realidad nadie sabe bien qué función cumple pero a Gaturro le gusta pasearse por la oficina para hacer sutiles reflexiones del ámbito laboral).»

Nik, su creador comenta que «Gaturro es muy inseguro, curioso, un poco diablito pero muy tierno. Como todo gato es muy observador del mundo, de su casa, de sus amigos… le gusta meditar sobre lo que pasa a su alrededor y por sobre todo, es un romántico incurable… En la casa, adonde llegó guardado en una cajita de cartón, vive con Agustín, Luz, su mamá, su papá, Gaturrín, el pececito Emilio, la arañita, y el ratón Ramiro… Gaturro tiene un gran amor no correspondido que es Agatha. Y opina que necesita un psicoanalista porque ‘tiene comportamientos obsesivos con Agatha, fobia a su profesora, ansiedad amorosa…’ esta para el diván”.

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