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Convivencia en la escuela. Vivencias compartidas

Tema de la semana: Convivencia en la escuela: vivencias compartidas. Psicopedagogía-Psicoanalista (especialista en atención niños y adolescentes. Orientación a padres e instituciones educativas)
nino escuela
Convivir implica, vivir con. En la escuela los niños viven con otros niños, con adultos (maestros, directores, preceptores)
Sin duda vivir con otros y particularmente cuando esos otros no han sido elegidos por uno conlleva necesariamente una suerte de negociación, pactos, convenios, a veces explicitados y otras veces no, sólo por una repetición inconsciente, por una práctica cultural: cuando suena el timbre al ingresar a la escuela se sabe que hay que formar e izar la bandera. Esto es algo convenido para empezar la convivencia en la escuela, es una práctica cultural, no se discute, simplemente se hace.
La tesis de Sócrates sobre la relación del conocimiento y la templanza alude a que los hombres escogen entre  las acciones  aquellas que juzgan más ventajosas, pero para ello es preciso conocer.
En el artículo 12 la Convención sobre los derechos del niño dice: “Los Estados Partes garantizarán al niño que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que afectan al niño, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño, en función de la edad y madurez del niño”.
El  conocimiento debe estar ubicado en el lugar primordial  para que el sujeto sea capaz de regular sus comportamientos.
Cuando los alumnos saben qué valores convienen para la convivencia,  cuando pueden pensar  y reflexionar sobre los valores, en conjunto con los compañeros, el trabajo será en beneficio de todos. Así se logrará discernir entre los efectos que los comportamientos tienen sobre sí mismo y sobre los demás.
La escuela y la familia, deben trabajar desde los primeros momentos de la infancia la virtud, la verdad, el respeto por el otro y por sí mismo para pasar lentamente de una moral heterónoma a una moral lo más autónoma posible y al servicio del bien común y propio.
Convivencia es un término que alude a avenencia, coexistencia, acuerdo, compatibilidad, armonía, entendimiento, sociabilidad, diálogo. El término incompatibilidad es el antónimo.
Entendemos que los momentos de convivencia, (por estas épocas y en muchas escuelas y familias),  son escasos abundando las situaciones de  incompatibilidad, desacuerdo, disconformidad, contrariedad.
¿Qué valores  se han roto, deteriorado o bien  se desconocen cuando la convivencia fracasa y se transforma en malestar?
Y trabajando con niños podemos preguntarnos sobre el lugar de los adultos que conviven con el niño. Qué valores y qué necesidades desconocen o no ponen en práctica los adultos que acompañan la crianza o educación, de tal modo que los niños actúan a partir de esos anti-valores.
Lic. Susana Passano
Psicopedagogía-Psicoanalista (especialista en atención niños y adolescentes. Orientación a padres e instituciones educativas)
Consultorio en Belgrano Cabildo 1370 PB
TEL 4786-3672 – 15 3624 4400

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