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La cruz de ramitas. Escritores de cuentos infantiles de Buenos Aires, Argentina. Cuentos espirituales.
Cruz de ramitas
En la hora de catequesis, Lorenzo había realizado una cruz con ramitas que había encontrado en el jardín.
No sabía a qué planta pertenecían porque estaban tiradas debajo de una hojas.
Las había limpiado un poco y las había atado con una soguita. No se había esforzado mucho y lo había hecho en un ratito para ponerse a hablar con los compañeros que le estaban dedicando más tiempo a la tarea.
Después de mostrársela a la catequista, la guardó o, más bien la tiró, dentro de la mochila.
Al llegar a su casa la dejó en un rincón de su escritorio y se olvidó de ella. A los pocos días, la catequista les dijo que todos debían llevar la cruz que habían hecho en la hora de catequesis, a la escuela, porque iban a realizar una celebración y las iban a poner sobre el altar para que fueran bendecidas.
Cuando llegó a su casa Lorenzo recordó que la había dejado en algún lugar de su habitación pero no sabía dónde. La buscó por arriba del escritorio, por debajo y en los estantes de la biblioteca, pero no pudo encontrarla.
Le preguntó a su mamá si la había visto y ella le contestó que había pensado que eran dos ramitas del jardín y que las había tirado por la ventana.Lorenzo, de inmediato fue a buscar su cruz en el jardín debajo de su ventana  y la encontró pero, cuando la quiso levantar, no pudo.
En contacto con la tierra durante un par de semanas, las ramitas habían echado raíces y de una de ellas, había salido una pequeña  y hermosa flor.
Lorenzo se quedó mirando asombrado y recordó las palabras que le había dicho la catequista: la piedra que fue desechada se convirtió en la fundamental
Fin
Hecho el depósito de ley 11.723. Derechos reservados. Prohibida su reproducción total o parcial.

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