Por Sagrario Martín Moreno.
Rosalina y el valle de las mariposas. Escritora de España. Cuentos de hadas. Tercer cuento de Rosalina.
Rosalina y el valle de las mariposas
Rosalina llegó a un valle dónde había muchas mariposas, volaban de flor en flor y todo lo llenaban de color.
La duendecilla preguntó a una mariposa que volaba cerca de ella:
- "¿Por qué estáis tan contentas?".
- "Esta noche hay una fiesta, la mariposa que tenga las alas más hermosas será la reina de todas nosotras".
Una mariposa se acercó, abrió sus alas y muy orgullosa dijo:
- "Mirad, como mis alas brillan a la luz del sol, la elegida seré yo".
Otra dijo:
- "Seguro que no ganarás, mis alas tiene el color del mar y reina me elegirán".
Otra mariposa se acercó y dijo:
- "Creo que ninguna de las dos ganará, mis alas son rojas como las amapolas, yo ganaré y vuestra reina seré".
Rosalina en silencio las escuchaba y pensaba:
- "Son preciosas, pero muy orgullosas y vanidosas".
Había una mariposa que no decía nada, la duendecilla se acercó y le preguntó:
- "¿Vas a ir a la fiesta?"
- "Claro que iré, pero no ganaré".
- "¿Por qué dices eso? Tus alas son muy bonitas, tienen los colores de la sencillez y de la humildad, creo que ganarás".
- "Seguro que no, nadie se fija en mi, pero estoy contenta y soy feliz".
Las alas de la mariposa, tenían los colores del arco iris, y era la más hermosa de todas.
- "Es la más sencilla y merece ser la reina".
Rosalina tocó las alas de la mariposa y estas empezaron a brillas como estrellas, tanto brillaban, que no podían dejar de mirarla y esta mariposa sencilla y humilde fue la que ganó.
Rosalina se acercó a las otras mariposas y les dijo:
- "A veces creemos que somos las más hermosas, pero es la sencillez y la humildad lo que nos hace bonitas de verdad".
Todas comprendieron que tenía razón, y aprendieron la lección, nunca más volvieron a ser vanidosas.
Se dieron cuenta de que la reina elegida fue la mariposa que no era presumida.
Cuando terminó la fiesta Rosalina se despidió de las mariposas… y empezó a caminar, porque el Bosque de la Luz tenía que encontrar.
Fin.
Rosalina y el valle de las mariposas es un cuento de Sagrario Martín Moreno © Todos los derechos reservados.