Por Rossana Favero-Karunaratna. Cuentos de animales
Hay una ovejita que tiene un gran problema: no puede dormir. Y es que todos aquellos que tienen el mismo problema cuentan ovejas para poder descansar y la ovejita siempre andaba ocupada, porque tiene que saltar una cerca todas las noches. Ella es la primera en hacerlo y por lo tanto nunca puede dormir.
La ovejita pensaba en resolver su problema de la misma manera: encontrar un animal y contarlo hasta que se acabara la fila de los que saltaran la cerca de una buena vez.
Pensaba en contar elefantes pero ellos no saltan. Luego en contar monos pero ellos siempre se distraen haciendo alguna travesura. De repente gatos pero... los maullidos vinieron a su mente y no la dejaron pensar.
Entonces ya muy cansada se imaginó que era una nube y como tal se elevó al cielo y se quedó finamente dormida en un lugar muy distante.
Al día siguiente la encontraron sobre uno de los techos de las casas de la ciudad muy feliz y descansada.
¡Por fin pudo dormir!