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El hombre que deseaba construir un puente. Cuentos para jóvenes sobre valores.

El hombre que deseaba construir un puente es uno de los Cuentos para jóvenes sobre valores del escritor Carlos Savariano. Cuento sugerido para adolescentes, jóvenes y adultos.

El hombre se propuso construir un puente sobre un arroyo que transcurría por delante de su casa. Compró veinte mil ladrillos. Cuando recibió el pedido, percibió que todos los ladrillos no eran iguales. Le evidencia lo contrarió porque él era extremadamente detallista y hasta obsesivo con la similitud.

En su supina ignorancia sobre el tema, siempre había considerado que los ladrillos debían ser un calco uno de otro. Los examinó uno por uno, los sopesó, los midió, los lamió, hasta dar con aquel que, a su criterio, era el ladrillo perfecto. Entonces separó aquellos útiles que coincidían con sus estándares y desechó el resto, arrojándolos al arroyo dónde se hicieron añicos al estrellarse con las rocas del lecho. Solamente una cuarta parte de su compra resistió el análisis de calidad.

Ahora bien, cinco mil ladrillos no le bastaban para construir un puente. Por lo tanto, llamó al corralón para realizar un nuevo encargo. En primera instancia, planteó el reclamo sobre la falta de uniformidad de los implementos y declaró el pesar que eso le había causado. El empleado que lo atendió, muy amable, lo supo comprender y le comentó que trasladaría la queja al fabricante de ladrillos. Satisfecho, realizó otra compra por una cantidad similar a la primera.

Sabiendo que le esperaba, tomó su ladrillo molde y repitió la operación de testeo con los mismos resultados. El arroyo se llenó de cascotes. El hombre pensó que, teniendo en cuenta su reclamo, en la próxima compra seguramente llegarían los ladrillos perfectos.

Mientras tanto, a su alrededor crecía un muro de ladrillos inmaculados.

Llegó el nuevo envío y nada. Y otro más y nada. A esta altura, ya se había olvidado del puente que deseaba construir y las paredes se elevaban, rodeándolo, hacia el cielo.

Esta obsesión, al cabo, no pasó desapercibida. Y pronto se hizo universal la búsqueda del ladrillo perfecto. Las caleras y los fabricantes no daban abasto de tantos pedidos de ladrillos.

Cuando ya no hubo más ladrillos, el hombre se sentó a morir en su trono de ladrillos.

Cuando llegamos en nuestras naves dando inicio a la tercera oleada civilizatoria encontramos un páramo lleno de cascotes y osamentas. Y, aquí y allá, altísimas fortalezas de ladrillo. En su interior, cada una, tenía un trono de ladrillos y en el reposaba el esqueleto de un ser humano, testamente coronado por un perfecto ladrillo.

Fin

El hombre que deseaba construir un puente es uno de los cuentos para jóvenes sobre valores del escritor Carlos Savariano. Cuento sugerido para adolescentes, jóvenes y adultos.

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