Promover y sostener el hábito de leer
Promover y sostener el hábito de la lectura es un desafío educativo prioritario. Para esta tarea, los docentes deben estimular tanto el uso de libros como de los nuevos soportes de la lecto-escritura.
El relegamiento de la lectura es un fenómeno que se manifiesta en diferentes países. Por ejemplo, en los Estados Unidos se ha venido registrando un ascenso del número de chicos de entre 9 y 16 años que leen todos los días por diversión, pero la cifra cae abruptamente a partir de los 17 años. La cuestión, entonces, es buscar mecanismos que sostengan la lectura entre los adolescentes mayores y los jóvenes adultos.
Una estrategia interesante es la que promueve el uso de las nuevas tecnologías para forjar el hábito de la lectura. Internet, blogs, chats y foros son algunas de las nuevas formas de transitar la lectura y la escritura que deben ser aprovechadas, superando la antinomia que las enfrentaba al libro impreso.
El abandono o el relegamiento de la lectura provocan deficiencias en la comprensión de textos, reduce las oportunidades laborales y puede condicionar el modo de ejercitar la ciudadanía. Por eso se debe promover la lectura especialmente en las escuelas de las zonas más postergadas.
Promover la lectura es un desafío educativo prioritario, porque su relegamiento provoca deficiencias de aprendizaje y reduce oportunidades laborales. Es posible hacerlo a través de los soportes electrónicos.
Fuente: clarín.com