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El diario. Cuentos sobre jóvenes enfermos de leucemia

El diario. Cuentos sobre jóvenes enfermos de leucemia

El diario. Liam Matheus, escritor peruano. Cuento para padres. Cuentos sobre jóvenes enfermos de leucemia.

La pequeña de ojos alegres ahora los tenía tristes y medio llorosos, no se apartaba de los brazos de su madre quien miraba cómo el ataúd donde reposaba su otra hija, Alicia, estaba siendo enterrada.

Viviana se preguntaba el por qué ella no se había despedido cuando la consideraba su mejor amiga aparte de que era su hermana mayor. Alicia sufría de leucemia llevándosela a mejor vida a sus 18 años, no quería contárselo a su hermanita menor y por tanto para Viviana su muerte era una amarga y decepcionada sorpresa.

Ya el ataúd estaba cubierto de mucha tierra y Vivi decía: _Ali, hermana… Su madre la abrazó fuerte pidiéndole que sea fuerte, pero en su delicado cuerpo la fortaleza moría como los recuerdos que tenía con su hermana. Siempre jugaban en las tardes y era la consentida.

Cuando sus padres se separaron Vivianita estaba muy deprimida por semanas, pero Alicia la hizo revivir de nuevo, ahora, se sentía como la hoja seca en un bosque, sola.

Pasado un par de días, la madre de Vivi decidió llevar todas las cosas de su hija ya fallecida al garaje para limpiar el cuarto y así tener un cuarto de visitas, claro que también era como para limpiar el triste pasado que le tocó vivir. Puso todas las cosas distribuidas en cajas de cartón, cuando se disponía a llevarse una caja notó que estaba el vestido rosado y adornos de oro que regaló a Alicia en sus 15, no aguantó la pena y sentándose en la cama lo acariciaba y se tapó la cara con él para llorar.

Viviana entró y se compadeció de su mamita, ya cerca de ella le dijo:

_No llores mami.

_No lo voy a hacer

_Pero lo estás haciendo.

_Abrázame -parecía una luna abrazando a una estrella-, mira este vestido, era de tu hermana, lo usó en la fiesta de sus 15.

_Es bonita aún, recuerdo que tenía casi 7 añitos.

_Si, muy traviesa.

_Mami, quisiera usarla por favor cuando cumpla 15, si?

_¿De verdad?

_Sipi _Pues… claro hijita.

Conformes madre e hija, decidieron sacar más cajas para el garaje, Viviana se quedó sola para acomodar y sacar más cosas, fue al armario para ver si había quedado algo y nota que en la parte superior había un pequeño librito de color rosado con dibujos de Winnie Pooh.

Vivi lo sacó y se dio cuenta que, por el título, era el diario de su hermana Alicia. Lo guardó para que pudiera leerlo en su cuarto. Luego de la cena, se apresuró en ir a su cuarto, sacó el diario debajo de su almohada y echada se disponía a leerlo.

Eran muchas hojas, así a vuelo de pájaro notó que escribía sobre su enamorado Jorge, de sus amigos, de ella misma, de su familia… en fin, de todo. Vivi se centró en una página y leyó lo siguiente:

«Martes, 20 de febrero del 2006: hoy amanecí con ganas de ver a Jorge, es un chico de mi universidad que me gusta mucho, es simpático y ayer me habló, ¡qué emoción! creo que mañana me invitará a salir, si es así lo aceptaré, pues a veces una necesita sentirse completa en el amor, tengo a mi madre y hermana que las amo, Jorge solo es un complemento más, el amor es así, siempre extraño pero a la vez bueno, dicen que es como una enfermedad y que la cura es un beso, ya una vez me tocó estar enferma. Manuel se fue de mi vida así como llegó, por eso hay que ser prudente… y hablando de Vivi, esa niña es un amor, jugamos vóley en la tarde y le enseñaba cómo sacar y dar mates, se le veía graciosa, su risa es música para mí. Nunca olvidaré el regalo que me hizo en mi cumpleaños, estaba mal porque aún sufría por Manuel, pero ella, apenas amaneció entró a mi cuarto y me cantó su canción favorita, la de Rebelde, esa que dice: Sálvame, linda balada, su intención vale mucho y eso no se compra ni con todo el oro del mundo, Vivi es la mejor al igual que mi mamá. Dios, si me escuchas te pido por favor que nunca les pase nada malo a ella ni a mi madre, antes prefiero que me suceda a mí…»

Vivianita no aguantó su pena por esas últimas palabras. Botando pequeñas lágrimas decía: _Alicia…no…no debiste decirle que te pase a ti, te…extraño mucho. Al día siguiente Vivi estaba en el recreo, sus amiguitos estaban extrañados al ver cómo ella no se apartaba del diario y prefería en vez de jugar con ellos leerlo sentada en el pasto.

Eligió otro día en la vida de su hermana:

«Jueves, 3 de mayo del 2006″: odio los celos de Jorge, sólo por verme hablar con Enrique quien es un amigo, casi parecía que lo iba a pegar, menos mal que no pasó a tanto. Aunque Jorge me pidió disculpas no olvidaré el roche que me hizo pasar, parecía un troglodita, me hace recordar a mi padre que siempre se peleaba con mi mamá, yo sólo me apartaba de sus peleas e iba a llorar a mi cuarto porque me sentía impotente de no ayudar a mi madre, menos mal que ya no está mi padre, odiaba sus peleas y aunque nos abandonó me da igual. Cuando yo me case nunca pelearé frente a mis hijos, pues ellos se sentirían mal como yo una vez, tengo que darles un buen ejemplo de madre como lo es la mía…»

En eso, un pelotazo le choca a Vivi haciendo que accidentalmente salte el diario al suelo de sus manos.

_! Oye, fíjate en lo que haces! _Te atravesaste en el camino de la pelota pues.

Luisito había tirado la pelota y sin querer le cayó a su compañera, Vivi le seguía increpando:

_No seas gracioso, estaba leyendo tranquila y tu pelota me cayó.

_Ya ya, renacuajita.

_Cállate cara de sapo. Y justo recordó las palabras de su hermana: «Odio las peleas», por eso se calló y siguió con la lectura:

«…mi esposo será diferente, será buen hombre y no un machista troglodita de la edad media, es que las peleas se resuelven con diálogos y no con gritos, siempre me pregunté por qué las personas gritan y creo que es porque cuando el odio les invade en sus corazones, estos se van alejando y por eso deben gritar para que se sigan escuchando, pero si se habla en paz y con amor, perdonando con palabras amables, los corazones se acercan y como en una ocasión que me pasó con Jorge, a veces hasta las palabras sobran y con un beso se puede reconciliar dos corazones que tenían odio, por eso es difícil mantenerse en paz cuando se pelea, pero no imposible…»

Luis se acercó a Viviana y le pidió perdón por decirle renacuaja, ella se sorprendió por la rara actitud de su amiguito y guiada por las palabras del diario, le dijo:

_Ok, olvídalo entonces, pero quiero preguntarte algo

_ ¿Qué cosa?

_ ¿Qué es troglodita?

Desde esa vez Vivi no se apartaba del diario de su hermana para nada, para ella era como tenerla a su lado. Una tarde la pequeña quedó en salir con sus amiguitas al parque a jugar, pero su mamá le prohibió pues no había cumplido en hacer sus tareas, Vivi le decía:

_¡Pero ma!, la tarea lo puedo hacer más tarde.

_No, dijiste que ayer lo harías y no cumpliste.

_Ma…ya pues no seas mala

_No insistas, ve a tu cuarto y termina tu tarea

_Pero me tomará toda la tarde hacerla….porfa si?

_Entonces es mejor que empieces ahora.

Fastidiada y con un gesto de rebeldía, Vivianita se va a su cuarto y se sienta ante sus cuadernos y lápices pero no tenía ganas de hacer la tarea, en cambio abre el diario y buscaba un día en donde Alicia hablaba sobre lo que le pasaba ahora, de desobedecer a su mamá, y parece que lo encontró:

«sábado, 17 de junio del 2006: hoy mi mamá me prohibió salir con Jorge porque no hice el trabajo de la universidad, mi hermanita estaba aún en el cole menos mal porque no me habría gustado que nos viera discutir. La verdad quería salir con Jorge a pasear por ahí pues habíamos quedado en vernos, desesperada me encerré en mi cuarto, en mi caverna, en mi refugio…pensaba si el castigo era justo o no, al rato mi madre entró y me dijo que no me castigaba por molestarme sino porque debía ser responsable, y la responsabilidad es parte de quererse a uno mismo, si uno no es responsable con sus cosas es como si no se quisiera y menos se respeta. Mi madre entendió mis ganas de verme con Jorge y me dio permiso de salir a verlo pero con la condición de que para la próxima haría mis deberes como debe de ser, la sorpresa fue que yo decidí quedarme…Llamé a Jorge y le dije que no saldría, el entendió y quedamos otro día en vernos. Vivianita llegó del cole y juntas hicimos mi trabajo mientras me contaba lo que le pasó en su cole. Miró que tenía mis ojos aún rojos por llorar pero le dije que los tenía así por el cansancio, me creyó…»

La mamá de Vivi entró al cuarto y la pequeña apenas la vio le dijo sin demora:

_Mami, seré responsable, trataré de hacer mi tarea

_Estaba pensando que fui injusta contigo, pues hoy es domingo y …

_No mami, no importa, ya otro día saldré con mis amigas

_¿No estás molesta?

_No _Entonces… si quieres te puedo ayudar a hacer tu tarea

_Claro, ven mami, ayúdame en la suma de…de fracciones.

Otro día en el cole, otro nuevo recreo para Vivi quien seguía en la obligada lectura del diario. Esta vez leyó aquel día fatídico para Alicia, la pequeña empezó a leerlo con el ceño fruncido:

«miércoles 23 de agosto del 2006: no podré dormir hoy, mi corazón esta que se parte en dos, mi alma llora…Dios no me hagas esto ¿por qué a mí?, hoy me hice los análisis y el doctor me dijo que tenía leucemia avanzada y… mi sistema de inmunidad estaba baja, es decir me queda poco tiempo de vida… ¿qué será de mi madre? ¿Qué será de mi hermanita querida? no quiero dejarlas solas, me extrañarán mucho, ni coraje tengo de decirle la verdad a Vivianita, la haría sufrir demasiado, llorará mucho por mí. Maldito destino, no es justo, me iré de este mundo sin casarme, sin tener familia, ya no disfrutaré las tardes con mis amigos, con mi familia, las clases de vóley con mi hermana, las dejaré solas… Dios mío, por favor dame un milagro de vida, haz que me recupere para que no me las quites llevándome a tu lado, me siento débil, apenas puedo sostener el lapicero, qué raro, mis fuerzas se van yendo, me da miedo estar en este hospital internada…»

Luisito se acerca a Vivi y observa que ella estaba triste queriendo llorar, le preguntó qué le pasa y le respondió:

_Nada

_ ¿Qué lees?

_Es… el diario de mi hermana.

_ ¿Y estas triste porque estás leyendo algo malo?

_Si

El niño saca una manzana de su lonchera para invitarla a Vivi quien le agradece. le pregunta:

_¿Tienes hermanos Luis?

_Si, somos cuatro varones, soy el último, a veces peleamos pero eso hacen los hermanos no? jugamos así.

_Nunca… dejes de quererlos

_¿Por qué?

_Cuando uno de ellos te falte entenderás lo que te digo.

Antes de acostarse, Vivi lee el último día que Alicia escribió en vida, sin sospechar que en esas palabras una sorpresa la aguardaba.

» lunes, 15 de enero del 2007: ya no podré seguir escribiendo más, con las justas tengo fuerzas en mis manos, mis dedos tiemblan y mi tos se hace más intensa, pero vale la pena porque esta parte quiero dedicártela a ti Viviana, a ti que seguro estás leyendo mi diario…» La niñita se sorprendió por esa última frase, siguió leyendo: «…¿cómo se que estás leyendo?, pues te conozco bien y sé que eres muy curiosa, encontrarás mi diario en el armario y para entonces me habré ido de este mundo. Hermanita, perdóname por no seguir contigo y por ocultarte lo que me pasaba, Vivi…no puedo más, sabía que esto pasaría y por eso grabé un video en dvd para que lo veas, Jorge me ayudó, el dvd está en la caja de los otros discos, allí hay uno que dice PARA LA NIÑA MAS LINDA Y BUENA DEL MUNDO, ve y ponlo en el dvd, rápido…»

Vivi fue al garaje y lo encontró entre los demás, regresó y lo puso en el dvd, apretó play y en la pantalla ve a su hermana echada en la cama del hospital, demacrada, su voz apenas se escuchaba y sus ojos perdían el brillo de la juventud, la pequeña se compadeció de esa imagen y empezó a llorar, Alicia le decía entonces:

_»¿Cómo estás mi pedazo de vida?¿bien? – no dejaba de toser -, como ves estoy muy enferma y…. quise grabar este video para que nunca me olvides… ¿qué te pareció mi diario? interesante no? – ni pudo sostener una sonrisa, Vivi se acercaba más a la televisión -,¿cómo sigues en el cole? espero que bien, sé que pasarás de año, de eso no hay duda, eres chanconcita jaja, casi como yo, entrarás a secundaria por fin, una etapa muy difícil porque serás adolescente, una niña juguetona, alegre, bonita, romperás muchos corazones….COF COF!!, me habría gustado acompañarte para aconsejarte y ayudarte a ti y a tu mamá pero…el destino quiso que me vaya antes de lo esperado… Vivi, prométeme que cuidaras mucho a nuestra madre, yo viviré siempre en sus corazones… sabes? me adelante a tu santo, hay una sorpresa para ti, busca entre el armario una caja de cartón bien cerrada, esa es para ti, ve…

Sin pensarlo dos veces, la niña corre a traer la caja y lo abre, era un peluche en forma de conejita rosada y con anteojos, linda y suave, Vivi llora de la emoción, mientras, aprieta play de nuevo en la tele y Alicia le seguía diciendo:

_¿Te gustó? estoy segura que sí, Vivi…debo irme, mi respiración está débil y no puedo hablar más….

_¡No te vayas!…por favor, hermanita

Corre a la pantalla y lo abraza mientras sus lágrimas lo bañan en una profunda tristeza

_Vivi, toca mi mano a través de la pantalla Ella le obedece y sus manos parecían tocarse a través de la televisión, las tenía alzadas y aunque para Vivi y Alicia estaba en otra parte, sus corazones se unían en ese extraño lazo de hermandad.

_Vivi, recuerda esto: nunca te voy a dejar, estaré contigo a través de mi diario, ahí están mis pensamientos, las anécdotas que viví y que tu vivirás también, adiós mi chiquita, te amo mucho, tú y mi mamá serán…- la interrumpe una fuerte convulsión de tos-… tú y mi mamá serán mis ángeles en el cielo y yo seré tu ángel guardián en la tierra mi pequeña, chau…te amo…mucho….

El video se cortó entonces, Viviana no aguanta más y explota en llanto muy lastimada y triste, su madre la escucha y ve a ella encontrándola en el suelo de rodillas frente a la tele, sosteniendo el peluche:

_Hijita… ¿qué tienes? ¿qué paso? dime

_Era mi hermana

_¿Cómo?

Ya más calmada, Vivi le decía:

_Me regaló este peluche antes de morir, lo tenía en una caja _Pero… _Está en ese video, si quieres mira.

La madre ve el video y al final se sentía orgullosa y feliz de su hija mayor, aunque aún en su corazón la nostalgia la invadía con profunda pena.

Vivi aprieta al peluche cerca de su pecho y se sorprendió al ver que era musical, la canción que se escuchó era SALVAME de rebelde, la misma que le cantó a Alicia en su último cumpleaños, ella sonreía por ese lindo detalle.

_Mi hermana no murió Murmuró, fue a su ventana sin soltar el peluche, ve el cielo estrellado y la luna llena mientras sintiendo por fin una alegría y una gran dicha, se dijo:

_Tú no has muerto hermanita, solo te convertiste en mi ángel guardián, siento tu presencia.

Una ligera brisa de aire entró a su cuarto, pero para Vivi, aquella brisa era como un pequeño calorcito que la llenaba de paz.

Fin

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